El concepto de caridad no tiene que ver, por mucho intente engañar la R.A.E. o quien sea, con la solidaridad, ni mucho menos con el mutuo apoyo entre iguales. La caridad implica una relación de poderes, en la que el que tiene posibles, por mor de cierta virtud cristiana o de la mala conciencia, proporciona migajas de limosna o auxilio al necesitado. Por supuesto, de esta forma la supuesta empatía que motiva el asunto es absolutamente falsa, y además no se cuestiona el sistema de las cosas ni la escala de valores, más bien -al contrario- se refuerzan.
Con las pantomimas que se montan los pudientes para limpiar su imagen (o blanquear pasta, o desgravar al fisco) mediante las actividades caritativas se dan casos paradigmáticos como el que presentamos de la mano de Roger y su acertada mala leche. "Con la de empresas que tienen los ricachos y nada más piensan en los pobricos":
Pinchar para ampliar. Traducción de los textos de la última viñeta (tras el banquete-fiestuki): Llenos y hartos, vuelven a casa sabiendo que, después del empacho, el mundo es un poco más justo. - Todo el día currando para explotar a los pobres... y toooooda la tarde jalando para ayudarlos - Cuánta faena nos dan los muy putas.
Se refiere al acto de presentación por parte de la familia Oriol-Tous en Manresa de una institución benéfica a la que acudieron famosetes de relumbrón de la aristocracia, la burguesía y la política. Sobre el autor de la historieta ya publicamos un post, pero de paso recomendar el blog del programa de Ràdio Pica "Maximum Clatellot" en el que también interviene.