Son innumerables y variados los personajes públicos famosos provenientes de distintos ámbitos (política -por supuesto-, arte, deporte, negocios...) que han realizado y realizan trabajos para los servicios secretos del propio país o de otro. No todos son conocidos, y hay nombres más curiosos que los manidos Mata-hari, Dreyfus, etc... En este artículo vamos a poner algunos ejemplitos, verificados y elocuentes, conocidos -con repercusión mediática casi nula- recientemente:
* Benito Mussolini, fue espía para el MI5 británico por 6.400 euros (100 libras de entonces) semanales, desde otoño de 1917 y durante al menos un año para mantener la campaña a favor de la guerra. Resultó ser su primer paso dentro del campo de la política.
* Ahmed W. Karzai, hermano y mano derecha del actual presidente (por pucherazo en verano de 2009) de Afganistan. Negociante considerado uno de los principales responsables en la proliferación del tráfico de opio (que los medios se empeñan en atribuir en exclusiva de forma falsaria a los asquerosos talibanes) y estafador inmobiliario entre otras perlas, ha estado cobrando desde 2001 de la CIA. Noticia aquí.
A la izquierda, el ridículo dictador fascista. A la derecha, el traficante afgano auspiciado por la CIA
Esto no es todo, hay otros espías más llamativos como George Orwell... ¡sí! el escritor marxista antiautoritario de "1984" y "Rebelión en la granja" resultó ser un chivato del gobierno británico a la caza del enemigo comunista. Otro caso (éste sí dudoso y por confirmar) es la teoría de que Hitler, a su vez, en una supuesta estancia en Londres hacia 1912-13 también trabajó para los servicios británicos.
